Human after all ~

Era viernes, y como todos los viernes curso todo el día, toda la mañana con Lenguaje, y toda la tarde con Dibujo. Ok, transcurrió toda la mañana bien, llego la tarde, hora de entrar a cursar nuevamente. Entré, y me senté en una mesa lo mas alejado de los profesores. En teoría tenia que llevar para corregir unas laminas, pero como últimamente dibujo se volvió una de las materias mas agobiantes que tengo y junto con el desgano que tenia no las hice. Los profesores no tuvieron la mejor idea que empezar a llamar a todos por lista, y ahí me empecé a sentir mal. Comencé a hacer lo que ponía, tenia un poco de tiempo ya que corro con la ventaja de que mi apellido es Ruiz y por ende estoy casi ultimo. Al ver que no llegaba a hacer todo entre en crisis. Una amiga me pidió que la acompañe al kiosco y entre la ida y vuelta me fume dos cigarrillos seguidos (osea estaba nervioso). No se verdaderamente porque me puse tan neurótico, y empecé a decirle a Manuela (mi amiga) cuan mal me sentía. Por primera vez sentía culpa de no haber hecho nada, y no es que no entienda, sino porque no me pinto hacerlo. Estuve a punto de no entrar e irme a mi casa sin enfrentar a los profesores, pero no, tome aire volví a entrar, junte coraje y antes de que me llamaran me puse frente a la profesora. Y le dice sin parar y casa sin respirar: “ mire no hice nada, no se porque no hice nada, supongo que porque dibujo no es una de mis materias favoritas, pero hoy sentí culpa, hasta el punto de cambiarme el estado de animo y ver pasar uno a uno a todos mis compañeros con sus laminas fue un karma. Ahora bien, de ahora en mas prometo hacer todo, pero no se lo prometo a usted, sino que me lo prometo a mi mismo, ya que el que salgo perjudicado soy solo yo. Creo que como muchas personas necesito comerme algún garrón para tomar conciencia y hacer lo que tengo que hacer”. Me miro, se rió y dijo, “bueno ponete las pilas y para la clase que viene traes las laminas”. Ya se, no era tanto.

Fue un claro ejemplo de cómo muchos de nosotros dejamos siempre todo para ultimo momento y que recién valoramos las cosas cuando están a punto de perderse o cuando ya se perdieron.